18.- Pues para mi, es parte de mi.

He llenado folios y folios con mis lágrimas de tinta. Los he llenado de tachones por haber escrito algo que no debía. He acabado llorando delante de lo que escribía mil y una vez. Me he sentido más enamorada cuando acababa de escribirlo. De echo he notado como en esas hojas he contado mi mayor secreto, el más profundo de todos y he decidido prender fuego a esa hoja. He empezado a escribir a lo loco y me he quedado sorprendida de lo bello que era. Porque escribir es como susurrar secretos, es como descubrir lo que guardamos. Es soltar todo de golpe y que después de varias semanas lo leas y las lágrimas caigan encima de la tinta que poco a poco se corre. 

Escribir, 

mantiene en distancia a mi locura.