Y solo voy a decir una vez esto. Lo siento. Ya. Siento ser feliz, porque sé que te jode. Siento que encontrar felicidad en pequeños placeres. Siento no saber donde esta el límite, y también siento sentirme especial. Pero lo cierto es que me da igual, completamente igual. Nadie tiene ni puta idea de lo que marcan mis leyes. Uy, se me olvidaba que no tengo.
Y podéis pensar. Vale, pero ¿Porqué? Porque sí. Porque soy libre de ir y venir. De pasarme horas metida en mi cuarto. De girarme a mirar a quien se acaba de cruzar conmigo. Por esto, y solo por esto, me siento bien. En serio. Estoy bien.
El cigarro se consume, pero no yo. Me levanto de ese banco para irme a algún sitio que aún no he pensado si quiera. Me despido, entonces, algún día volveré tal y como era. O quizás no. Me da lo mismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario